CÓMO CREAR UNA ASOCIACIÓN CANNÁBICA

La idea del siguiente artículo es ofrecer toda la información necesaria a aquellos que tienen en mente abrir una asociación cannábica en España. Muchos son los interesados en dicha labor, pero pocos son los que se atreven debido al desconocimiento y la falta de información existente. Cuando un consumidor se plantea la apertura de un club cannábico, instantáneamente le asaltan un amplio repertorio de dudas que, sumadas a la falta de información, acaban por desmotivarle. Pero eso se acabó, después de leer el siguiente artículo, las dudas se convertirán en certezas y la labor resultará más segura, rápida y liviana.

¿Qué es un club social de cannabis o asociación cannábica?

Los clubes sociales de cannabis son asociaciones que se abastecen y suministran cannabis para el autoconsumo entre sus socios. Ahora bien, para que una persona puede formar parte de un club cannábico, debe cumplir una serie de requisitos, como ser mayor de edad, ser consumidor de cannabis y no vender la marihuana de la asociación a terceros. De este modo, los socios pueden abastecerse, de forma privada, sin necesidad de acudir al mercado negro y los riesgos que ello conlleva. Más adelante se aclaran todos los requisitos para formar parte de un club cannábico.

Este tipo de asociaciones se crean sin animo de lucro, es decir, si tu idea es vivir de tu asociación, olvídalo. Es en este punto es en el que debemos diferenciar entre un Coffee Shop y una Asociación cannábica. El Coffee es un dispensario de marihuana para cualquier cliente, es decir, funciona como cualquier tienda y su objetivo principal es obtener beneficios. Ahora bien, las asociaciones tratan de facilitar el consumo a sus socios, sin pretender lucrarse. De hecho, en España los Coffe Shops están prohibidos, pero no las asociaciones. Esto se debe a que el consumo es legal, pero no el cultivo ni la distribución.

¿Cómo crearlo?

Para crear una Asociación cannábica, lo primero que se debe hacer es celebrar una Asamblea Constitutiva en la que se necesita una junta directiva constituida, por lo menos, por tres socios fundadores: presidente, secretario y tesorero.

Dicha junta directiva debe redactar los estatutos de la asociación, así como un acta fundacional, y todo ello deberá ser aprobado y firmado por los tres miembros de la junta. Para hacer este paso más sencillo, los clubes cannábicos españoles suelen emplear los estatutos del primer club cannábico de España, Pannagh. El siguiente oficializar todo, presentando estos documentos en el registro de la comunidad autónoma en la se va a abrir la asociación. Además, puede resultar muy útil unirse a la Federación de Asociaciones Cannábicas (FAC), de este modo se legitima el funcionamiento de esta y se contribuye al desarrollo del movimiento asociativo español.

¿Cómo inscribir a los socios y prevenir el consumo?

El siguiente paso es comenzar a sumar socios para nuestra causa. En ese sentido, los socios deberán entregar su DNI, abonar una cuota, reconocer el consumo habitual de marihuana y no tener antecedentes penales relacionados con la salud pública.

Otro tema para tener en cuenta es la previsión de consumo de la asociación. Para ello, los socios deben estipular la cantidad de cannabis que, aproximadamente, consumen al mes. Dichas previsiones se suman y el resultado legitimará a la asociación para abastecer a sus socios.

¿Cómo producir la marihuana para el club?

Desde S.L.C, nuestra recomendación es que la asociación auto-cultive su propio cannabis, ajustando la producción a la previsión de consumo que se ha hecho en el paso anterior. En el caso de que la asociación no disponga de los medios para producir su propio cannabis, deberán recurrir a la compra mancomunada.

A la hora de hacer calculas, se debe tener en cuenta que consumo máximo de un socio está estipulado en 60 gramos al mes. Además, dependiendo de si la marihuana se auto-cultiva o se compra, se deben presentar los precios de producción o de adquisición a los socios de la manera más transparente posible.

¿Cómo hacerlo funcionar?

El club no podrá publicitarse ni promocionar el consumo fuera de sus propios socios. Además, se debe de garantizar una organización democrática, garantizando a los socios su participación en cualquier decisión si así lo desean.

Una vez el club crece y se establece, se deben comenzar a repartir empleos a las personas responsables del correcto funcionamiento del club. Si un socio desarrolla alguna actividad en la asociación, ya sea produciendo, contabilizando o administrando, debe de quedar reflejado y oficializado con un contrato laboral. Obviamente, si se abre una asociación, se deben de respetar todos los trámites burocráticos, así como los aspectos laborales y normativos oficiales, a igual que en cualquier otra empresa u asociación.

Conclusión

Si se siguen estos sencillos pasos, realizar una asociación resultará mucho más sencillo de lo que el público en general cree. Crea tu propia asociación y haz un favor a la comunidad cannábica, a tus amigos y a todos los consumidores de tu barrio, pueblo o ciudad, ¡suerte y buenos humos!