¿CÓMO HACER UN LAVADO DE RAÍCES EN PLANTAS DE MARIHUANA?

El lavado de raíces es una forma ideal de eliminar los nutrientes y las sales acumuladas por el sustrato en el que se ancla el sistema radicular de nuestro cultivo. Eliminando dichos restos, evitamos que la planta siga acumulando más nutrientes y obtenemos cepas limpias de restos en su interior.

Con la retirada de los excesos de nutrientes en las raíces, los cogollos estarán igualmente limpios y eliminaremos impurezas que puedan alterar el sabor y el olor del resultado final. De hecho, al cortar plantas que aun contienen restos de productos, los cogollos que obtenemos producen sensación de irritación en la garganta y empeora la calidad de la cosecha. Así que, si quieres disfrutar de unas excepcionales propiedades organolépticas, realiza el lavado de raíces y asegúrate de obtener un sabor suave a la par que potente.

Cómo llevar a cabo el lavado de raíces

El proceso de lavar las raíces es más sencillo y rápido de lo que pueda parecer. Si bien es cierto que en alguna situación puede complicarse, por ejemplo, en caso de cultivos interiores con grandes dimensiones y sin una infraestructura adecuada. El objetivo es, básicamente,  introducir mucha cantidad de agua en el sistema radicular para eliminar los residuos, existen diferentes formas dependiendo el tipo de cultivo:

lavado de raíces

Lavado en indoores

Por la naturaleza del cultivo interior, muchas veces es imposible no inundar la sala si nos ponemos a regar sin parar las macetas. La única solución sería transportar las macetas al baño, meterlas en la bañera y administrar agua a buena temperatura para las raíces y sin pausa. Enseguida notarás como el agua que sale ya drenada cada vez está más limpia. Cuando el agua filtrada sea completamente transparente, recomendamos un último riego con la EC y el pH adecuado para adecuar ese último toque y dejar el sustrato en condiciones óptimas. Tomate el tiempo necesario para hacer el trabajo correctamente.

Lavado en exteriores

En esta ocasión es todo más sencillo, cómodo y rápido. Por lo general los cultivos de exterior ya tienen sistemas de riego y mangueras para facilitar la irrigación. Para lavar las raíces únicamente deberemos encender la manguera y regar y regar durante unos 15-20 minutos. Transcurrido ese tiempo deberemos realizar un último riego con los parámetros medidos y perfectos para que la planta no sufra ningún daño y el sustrato tenga las condiciones adecuadas.

Lavados profesionales

Las técnicas anteriores son muy caseras, baratas y sencillas de hacer pero no es la forma más sibarita de llevarlo a cabo. Si quieres ir a lo pro y quieres los mejores resultados posibles, deberías comprar productos específicos para la limpieza radicular. Por ejemplo, venden aditivos que son como ‘disolventes’ y pensados específicamente para eliminar las acumulaciones de sales y residuos. También recomendamos usar equipos y medidores de Ec para comprobar que los niveles están donde deben estar y saber si de verdad está sirviendo la limpieza.

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Cuándo llevar a cabo el lavado de raíces

Muchos cultivadores realizan más de un lavado durante el cultivo, pero desde S.L.C os recomendamos un buen lavado unas dos semanas antes de la cosecha. También recomendamos el lavado de raíces en los casos de sobrefertilización. Es decir, si vemos signos en la planta de existir un exceso de fertilizantes en el sustrato, lo mejor es realizar un lavado de raíces rápidamente. Algunos signos que nos indican dicha sobrefertilización son los colores verdes muy oscuros (exceso de nitrógeno), las hojas secas que crujen con facilidad (exceso de nitrógeno) o las hojas dobladas en forma de garra (exceso de fósforo).

Si aún tienes alguna duda sobre el lavado de raíces, no dudes en dejar tu comentario y te contestaremos con la mayor brevedad posible. Además, si tienes algo que aportar a lo dicho, en forma de experiencias, opiniones o fotos, no dudes en dejar tu comentario, seguro que otros lectores lo agradecen.

Corrección de problemas de raíz

Existen casos en los que las cepas sufren alguna enfermedad radicular y conviene realizar el lavado de raíces para poder ver claramente lo que están sucediendo bajo del sustrato. En algunos casos se han formado nudos en las raíces y el cultivador debe retirarlos. Cortar las raíces enroscadas y dejar las más rectas y alargados favorecerá el posterior desarrollo de la planta. Un consejo adicional es que, como el proceso de lavado daña las raíces, es importante regar bien la planta.

Beneficios de limpiar las raíces

La técnica del lavado de raíces trae múltiples beneficios tanto al cultivador como al propio cultivo. Entre las más importantes destacan:

• Arregla y elimina la sobrefertilización lo que curará enfermedades, excesos e insuficiencias por bloqueos..
• Mejora el sabor de los cogollos o frutas cercándose más al original propio de la genética.
• El consumo es más saludable ya que elimina toxinas y picores de garganta.
• Mejora los niveles de Ec y por tanto la absorción, crecimiento y producción.